Leishmaniasis
Descripción
Son un grupo de enfermedades parasitarias causadas por especies de protozoos del género Leishmania.
El huésped y reservorio habitual son mamíferos, con frecuencia el perro, aunque puede haber otros. En algunos casos puede comportarse como una antropozoonosis. Se transmite por picadura de dípteros de los géneros Phlebotomus (Europa, África y Asia) o Lutzomyia (América). Los principales focos en el mundo están en Asia (India y países vecinos), Oriente Medio, África y América.
Hay 3 formas principales de la enfermedad en humanos: la leishmaniasis cutánea, que es la infección primaria y la forma más común, que si no se resuelve puede producir formas diseminadas en piel o más profundas en mucosas (leishmaniasis muco-cutánea) u órganos internos (leishmaniasis visceral o kala-azar, la forma más grave).
En Europa la enfermedad es hipoendémica en países mediterráneos. En España, al igual que en otros países de la región, la leishmaniasis es debida principalmente a Leishmania infantum, que produce formas tanto cutáneas y mucocutáneas como viscerales.
Las medidas de prevención se centran en evitar la exposición al vector, el diagnóstico precoz y el manejo adecuado de los casos humanos, además de las medidas de control del vector. Estas medidas se deben aplicar también al reservorio más común en nuestro medio, los perros, en quienes también se aconseja evitar la exposición al vector (evitar paseos en lugares y momentos de máxima actividad del vector, evitar pernocta en el exterior y uso de repelentes adecuados), realizar diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la infección. Por último, se han identificado otros reservorios zoonóticos silvestres (como conejos y/o liebres), que pueden ser relevantes en algunos contextos. No existe vacuna comercializada para humanos pero sí frente a la leishmaniosis canina.
La leishmaniasis humana es una enfermedad de declaración obligatoria en España.
Protocolo de vigilancia
Protocolo para la vigilancia y notificación
Versión 1 de junio de 2013.